El pasado sábado, celebrábamos la beatificación de Juan Elías Medina y 126 compañeros mártires. La Eucaristía se celebró en la Santa Iglesia Catedral, presidida por el prefecto para la Congregación de la Causa De los Santos, el cardenal Marcello Semeraro, y concelebrada por gran cantidad de obispos y sacerdotes. Fue un acontecimiento histórico en el que se sumaron al número de los mártires de Córdoba, este grupo formado por sacerdotes, seminaristas, religiosos y laicos que fueron muertos por odio a la Fe en la persecución religiosa de los años 30. Es una ocasión de innumerables gracias para toda la diócesis, el testimonio de cada uno de estos mártires que regaron con su sangre nuestra tierra de Córdoba y que a lo largo del tiempo ha mantenido la Fe de muchas personas.
Han sido elevados a los altares un total de 5 seminaristas. Sus nombres son:
•Antonio Artero Moreno. Nacido en Pozoblanco el 12 de marzo de 1912. Sufre el martirio en Valencia el 15 de septiembre de 1936, a los 24 años.
•Rafael Cubero Martín. Nacido en Carcabuey el 23 de septiembre de 1913. Sufre el martirio en Cañete de las Torres el 20 de agosto de 1936, a los 22 años.
•Antonio Montilla Cañete. Nacido en Puente Genil el 6 de agosto de 1913. Sufre el martirio en su pueblo natal el 24 de julio de 1936, a los 22 años.
•Manuel Montilla Cañete, hermano de Antonio. Nacido en Puente Genil el 16 de enero de 1919. Sufre el martirio en su pueblo natal el 24 de julio de 1936, a los 17 años.
•José Ruiz Montero. Nacido en Puente Genil el 25 de marzo de 1914. Sufre el martirio en su pueblo natal el 23 de julio de 1936, a los 22 años.
Para nosotros, para la diócesis y para toda la Iglesia supone un motivo para descubrir, admirar, e intentar imitar la sencilla vida de estos mártires que prefirieron la Gloria a través del martirio.